Construida en Montuïri (Mallorca) por TEd’A arquitectes (Jaume Mayol e Irene Pérez), esta casa se ubica en un solar cuadrado, pegándose a la alineación de la calle para liberar al máximo la superficie de un jardín interior con buen soleamiento. Esta disposición no conduce a adoptar el eje calle-jardín típico de este tipo de viviendas, sino a una ordenación bidireccional que hace que la casa mire en todas las direcciones, y que se refuerza con la disposición de la estructura de muros de carga, carente asimismo de una dirección dominante. Ordenados en esvástica, los muros se regruesan para dar lugar a nichos perimetrales donde se situán los servicios domésticos (escaleras, aseos, armarios), y en cuyo espesor se recortan ventanas que miran a la calle o al interior, sin que exista diferencia entre unas y otras. Los materiales de fachada revalorizan la artesanía local: sillarejos de arenisca local (marés) recuperados de la casa preexistente, y nuevas piezas de la misma piedra que forman con las anteriores un expresivo collage.

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