Viviendas en el Ensanche, Barcelona
Carlos Ferrater 

Viviendas en el Ensanche, Barcelona

Carlos Ferrater 


En una típica manzana del Ensanche de Cerdá se ha llevado a cabo esta actuación de sutura y consolidación del tejido, mediante la construcción de tres nuevas piezas residenciales. Dos esquinas opuestas de la manzana permanecen abiertas; así se crea un recorrido que la atraviesa, manteniendo el trazado de la antigua Carretera de Horta y dando acceso al patio interior. Remozado y ajardinado, en él se ubica un edificio bajo destinado a usos sociales para el barrio, que se ha construido en la misma operación, alineado con las franjas de diferente uso y tratamiento de la pavimentación. La implantación de esta dotación pública persigue dinamizar la zona, y así este edificio de líneas depuradas, en hormigón, vidrio, aluminio perforado y con cubierta de zinc, se inscribe en una tendencia de recuperación de los patios interiores del ensanche, con la sustitución de antiguos talleres y pequeñas industrias por equipamientos, vivienda o usos comerciales.

Los tres edificios de viviendas mantienen una imagen unitaria, que deriva del uso de los mismos materiales y elementos, como un tipo de paneles de celosía que permiten diferentes grados de exposición y protección. Sin embargo, ante los distintos condicionantes se producen variaciones y matices. Así, en sus dos fachadas más urbanas encontramos dos respuestas diferentes: en Roger de Flor las losas de hormigón se recortan y se pliegan permitiendo visiones oblicuas, mientras que en la calle Nàpols unos paneles estriados como segunda piel reducen esas visiones frontales de las fachadas enfrentadas.

En la esquina por donde se produce el acceso al jardín interior desde la calle Ali Bei aparece un primer edificio que resuelve la medianera y que alberga veinte pequeñas viviendas estudio. Cuatro viviendas se distribuyen en cada una de las cinco plantas, y se comunican por un pasillo que se adosa a la medianera y une el acceso vertical, que vuelca hacia el interior de la manzana, con la última vivienda, que remata en esquina con la calle. Cada vivienda estudio está dividida en dos bandas, paralelas al pasillo y a la fachada: una para los cuartos de cocina y baño y la otra para la zona de estar y dormitorio. Ésta última se amplía en todas las viviendas con balcones que miran sobre el paseo diagonal.

En las otras dos piezas las viviendas tienen mayor superficie; así, la de la calle Nàpols cuenta con dos viviendas de tres dormitorios y otras dos de cuatro, dispuestas en torno al núcleo de escaleras y dos patios; la de la calle Roger de Flor, por otro lado, organiza tres módulos contiguos por planta, en cada uno de los cuales se distribuyen cuatro viviendas, una de un dormitorio, dos de dos y una de tres... [+]


Cliente Client

Pro-Eixample

Arquitectos Architects

Carlos Ferrater, Ana Ferrater, Anna Vidal

Colaboradores Collaborators

Massimo Basile, Angela Jöhr, Oriol Solanes; Adrià Guevara (aparejador quantity surveyor)

Contratista Contractor

Metro 3

Fotos Photos

Alejo Bagué